lunes, 30 de agosto de 2010

Juegos de miradas


Era nuestro juego

Eran nuestros deseos

Tú mirabas en lo alto

Yo miraba desde abajo

Fueron juegos de miradas

Ardían los deseos

Sonrisas en nuestras caras

Mirándonos fijamente

Durara lo que durara

Cortos espacios de tiempo

Era nuestro juego

Sólo tú y yo lo conocíamos

el que a nadie más he enseñado

al cual echo de menos

Juego nunca confirmado

Un juego de salón

Donde me enseñabas tus pasos

y yo aprendía

Todo lo que de ti salía

Todo lo que tú explicabas

Era nuestro juego

que con nadie he compartido

porque sin ti no resulta ameno

porque sin ti no significa nada

Era el juego con el que una mirada juguetona

Me decía que subiese

Que me acercase a ti con paso lento

A escondidas, sin que otros ojos

se posaran en nuestro escondrijo

Un juego en el cemento

Una mezcla ficticia

¿Cuántas veces me miraste sin yo darme cuenta?

¿Cuántas yo lo hice?

Ya no lo recuerdo

Porque cuando al fin me veías

y sabías que yo a ti te miraba

Nuestro juego se completaba

Se tejían las redes

Se terminaba el crucigrama

Ya no tengo ese banquito

Ya no tengo ese segundo piso

Pero aun conservo tu mirada

En mis recuerdos

En mis sueños

Aun te veo


viernes, 20 de agosto de 2010

Welcome to the Jungle


Ya es ridícula la forma de actuar de muchas personas en este país, porque en ningún otro un se encuentra con lo que aparece en las calles, y no sólo las de Santiago, miren que hay varios que se jactan que en regiones no sucede igual.
La “Ley de la selva” cuando uno sale a la calle es, hoy en día, más marcada que nunca. O es tal vez más marcado para mi ahora que salgo más seguido en auto, o que salgo de mi casa para tomar micros que me lleven a la Universidad. En cualquiera de ambos casos se aplica lo mismo.
La decencia y el respeto por el que está a tu lado ya es prácticamente inexistente. Los atropellos (a los derechos y la buena voluntad) son cada día más visibles. La caballerosidad de quienes dan su asiento en la micro a mujeres embarazadas, de quienes ceden el paso, o de algo tan poco agotador o dificultoso como simplificar cualquier acción del minuto a minuto ya casi no se ven y si se ven, las personas están tan poco acostumbradas, que no reaccionan a la facilidad y terminan dificultando aún más todo el proceso.
Hoy en la mañana tuve clases temprano. Entré a las 8:30am y en el camino hacia mi Universidad (que normalmente dura unos 15 o 20 minutos en auto y de 1hr a 2hrs en micro) me pasaron 2 sucesos en menos de 4 minutos. El primero ocurrió en Valenzuela Llanos frente al nuevo –y horrible- Líder cuando, manejando por mi pista izquierda un ciclista que iba a en la derecha hace una maniobra brusca y sin ninguna indicación previa cruza hacia la mitad de la calle y queda al lado de mi ventana. Demás está decir que casi lo atropello y él ni pareció darse cuenta. Me acerqué un poco más, bajé mi ventana y (sin sarcasmo de por medio) le pregunté tranquilamente si “había cachado lo que había hecho” a lo que me contestó que “no le quedaba otra porque nadie le cedería el paso”, le dije que en ese caso esperara a que le dieran la verde de paso peatonal para cruzar la calle y así perdería el riesgo de morir aplastado por un auto, por ejemplo, una Ford Ranger como la que estaba manejando yo. En el intertanto, me dieron la verde y seguí avanzando, notando un jeep blanco a mi lado derecho. Como siempre, señalicé para doblar a mi izquierda en la otra esquina y, sin ninguna sorpresa, el jeep blanco llegado a la esquina y yendo a la par conmigo, sin señalizar o dar ningún aviso previo, se cruza o “me hace el encerrón” como es más conocido. Le toqué la bocina como para verificar si se había dado cuenta de lo ocurrido y claro, por el retrovisor me hace un gesto de “no seas latera”, “no molestes”, o algo por el estilo. ¡Menos mal me había despertado bien esta mañana y no andaba somnolienta o “me piteo un ciclista” y destrozo un jeep blanco al no hacerle el quite!
Además, ya no estamos hablando de que esas cosas pasen de Vespucio para abajo. Pasa en Las Condes, en La Dehesa y en todas partes del país. Donde sea que se mire ahora, sólo el más fuerte sobrevive.
Lo que más me frustra de todo esto, es que yo sí respeto a quien tengo a mi lado, lo conozca o no.
1.- Si alguien me adelanta, reduzco la velocidad para ser adelantada e intento darle todas las facilidades para que su maniobra sea rápida. Algún apuro tendrá y no necesito preguntarle cual es para darle esas facilidades. Sólo necesito saber que va más apurado/a que yo.
2.- Si alguien señaliza para cambiarse de pista, me detengo para darle la pasada. No siempre, pero intento que sea lo más seguido posible.
3.- Si veo que alguien está esperando para salir de una calle, de su casa, etc. a una calle que está concurrida, le doy la pasada. Si no, lo más probable es que se quede esperando hasta que el tráfico disminuya lo suficiente para pasar.
Podría seguir dando ejemplos, pero todo se resume en pensar en el otro y, como mi padre me enseñó de muy pequeña: “Nunca hacer al otro lo que no te gustaría que te hicieran a ti”. Es un lema que me ha quedado grabado y espero recordarlo por el resto de mis días. Si todas las personas tuvieran ese lema integrado en su día a día, ¿No sería mucho mejor el mundo en el que vivimos?

sábado, 3 de octubre de 2009

Acciones








Hablar
Hablar hasta morir cansados
Sin pudor, inconcientes
Con humildad, sin mentiras

Sentir
Sentir que estamos juntos
Tú y yo
Es lo más importante

Oír
Oírnos reír, cantar

Mirar
Mirarnos hasta no dar más
Aprendiendo detalles, relieves y colores
Adivinando el más allá

Soñar
Soñar nuestros cuerpos juntos
Entrelazados sin importar nada más
Solo felicidad

Escuchar
Escuchar nuestros anhelos
Nuestros deseos
Los latidos de nuestros corazones danzando en armonía

Besar
Besar hasta saciar
Conocer las curvas de tus labios
Conocer la textura de tu lengua

Amar
Amar nuestros deseos
Sondear
Entregar todo por ti

sábado, 27 de diciembre de 2008

¿Por qué?
















Porque te quiero

porque eres mi amigo
Porque con un gesto o una palabra me salvas la vida
Porque eres genial en todo aspecto,
con tus defectos y tus virtudes
Porque confío en tus palabras,
confío en tu mirada
Porque aunque no te des cuenta
transformas mis días
y me preguntas quien soy
sin enterarte de nada.

¡Que difícil es decir las palabras que prosiguen!
¡Te quiero! Te quiero y cada día más
Que alivio
Puede ser que te lo haya dicho
Muchas veces, quizás un par
y lo sentía
y aún lo siento
sólo quería respaldarlo,
dejarlo claro
Gracias, por ser como eres
por ser quien eres
porque me haces feliz
porque es imposible enojarme
aún mas odiarte

Porque aún no sé quien eres
y me maravillas
y me encantas con tu sonrisa
Que simple ¿No?
Porque apareciste en mi vida
y aún no te vas
Me sorprendes...
Con tu orgullo, tu bondad, tu ego, tu sabiduría y tus cientos de errores

domingo, 31 de agosto de 2008

Siente naturaleza



Nace en mi la fuerza para seguir luchando
todo se refleja en ti

todo se concatena en tu escencia

No niego que intentan votarme
o que me ponen varas que quizás no puedo saltar

Es ahí donde mi inteligencia se supera y me hace dar un paso atrás,
ver todo de otra perspectiva
y así puedo encontrar la solución al enigma


Normalmente es siempre lo que uno piensa que es imposible de hacer.


Quizás la respuesta no está en saltar sino cortar,
caminar hacia un lado

caminar hacia el otro

y quizás muchas veces es solo poner marcha atrás y decir
"este no era mi camino"

y al volver atrás encuentras cosas en las que no te habías fijado

Al mirarlas nuevamente,

te percatas de que son hermosamente bellas
y ahí te quedas

pasmado

en un susurro vuelves a evaluarlas

con un silencio calmo

lloras
son lágrimas dulces, lágrimas de felicidad
ternura

Y, nuevamente, así
vuelvo a ti
a las cosas que me haces sentir
a todo tu calor
a los olivos del futuro
a la forma de mirar
a los ánimos que me das
Todo vuelve a empezar.

sábado, 28 de junio de 2008

Reflejos


Solo logro ver mi reflejo
Nada parece real
Todo se ve distorsionado
Las formas que desaparecen
se nublan frente a mi

Es el reflejo del sol el que me confunde
La luminosidad opaca mis sentimientos
Ese estupor en mi voz
Todo lo que alguna vez conocí
Todo lo que siempre pensé iba a ser
es un reflejo mohoso de mi presente

Pues, claro
el futuro si es incierto
tu respuesta también lo es
Invades mi cabeza
No me dejas pensar

El reflejo en ese cristal
ese que no me deja ver mas allá
Todo es tan confuzo
irrealidad
Sigues aquí y no sé si alguna vez estarás
no sé si algun día el reflejo se hará realidad
si eso que imagino vendrá
¿Podré en algun momento inolvidable convertir
ese momento en que seamos solo nosotros dos
el momento en que nadie pueda intervenir?
los altos mandos de la ciudad
los amigos que siempre opinarán

Pues, es que yo te amo
contigo sueño día y noche
sueño con hacernos realidad
pero el reflejo en el espejo no nos deja ser mas
el reflejo de mi ser
el reflejo que seré

logro verte detrás de ese estupor
te ves tan lejano
te ves tan normal
y yo aqui
viendome desforme
solo las dudas de mi mente se reflejan en mi vista
como la nube se refleja en el mar
esa luna nostálgica
que me provoca llorar un mar de estrellas

Aun asi no estamos a la par
estas a dos centímetros de mi
a un kilómetro de nosotros
a un sin fin de poesías que vendrán
para intentar sanar mi alma
y lograr hacerme reír otra vez
ser feliz
Una felicidad que espero
Sea junto a ti

miércoles, 18 de junio de 2008

El miedo al qué vendrá


El no saber que pasará
como reaccionarán los que a tu lado están
el no tener idea de por donde empezar
el no imaginarte en otros lados
el no tener un designio preparado

Estar nerviosa de día
No dormir de noche
No tener ideas nuevas
Saber que todo se derrumba
todo por lo que peleaste
todo lo que habías soñado que vendría

El temor al no ver los mismos rostros 365 días
El temer no ver los mismos parajes 100 noches
las palabras que no llegan
los sueños del mañana bajo tierra
las pisadas en tu cara
los murmullos a tu espalda

Las risas y los llantos de los que no hablan
los cánticos tenebrosos de los que vuelan
Los himnos de alegría de los que ganan
es el miedo al qué vendrá
cuando no resulta tu plan

Es el miedo al qué vendrá
Cuando todos tus pasos han sido borrados
el oleaje borra todo tu andar
las voces de los otros acallan tu cantar
Las tinieblas de la noche en el lago de tu vida
La luna oscura, sin brillo
siniestros de locura
Es el miedo al qué vendrá...